Olivo – L

Descripción: El olivo es un árbol originario del Mediterráneo, conocido por sus aceitunas y su valioso aceite. Es resistente, de hojas verdes grisáceas y tronco retorcido. Se cultiva en diferentes países, incluyendo Argentina, en climas cálidos. Es apreciado por su belleza y su simbolismo de paz y longevidad.

Riego: El riego del olivo debe ser moderado. Durante la temporada de crecimiento activo (primavera y verano), regar regularmente para mantener el suelo ligeramente húmedo. Evitar el exceso de agua que puede provocar el encharcamiento y dañar las raíces. Durante el período de reposo invernal, reducir la frecuencia de riego, ya que el olivo necesita menos agua durante esta etapa.

Luz: es una planta que requiere abundante luz solar para un crecimiento óptimo. Colocar el olivo en un lugar soleado donde reciba al menos 6 horas de luz directa al día. Si se ubica en interiores, asegurarse de colocarlo cerca de una ventana soleada.

Sustrato: El olivo prospera en suelos bien drenados y ligeramente alcalinos. Es recomendable utilizar una mezcla de tierra de jardín, arena y materia orgánica (como compost) para asegurar un buen drenaje. Evitar suelos pesados o arcillosos que puedan retener el exceso de agua.

Fertilización: Necesita nutrientes para un crecimiento saludable y una buena producción de frutos. Aplicar un fertilizante equilibrado específico para árboles frutales o para olivos siguiendo las indicaciones del fabricante. La fertilización se realiza generalmente en primavera y principios de verano, cuando el árbol está en pleno crecimiento.

Poda: La poda del olivo se realiza para mantener su forma, promover la circulación de aire y eliminar ramas muertas o dañadas. La mejor época para podar es durante el invierno, cuando el árbol está en reposo. Asegurarse de utilizar herramientas de poda limpias y afiladas para evitar dañar el árbol.

FaitfulTip: Si se esperan heladas intensas en invierno, es recomendable proteger el olivo envolviendo su tronco con tela antihelada o materiales aislantes para evitar daños por congelación.