Set Pandurata en salteña ceramica

Ficus Pandurata: Es el broche de oro para cualquier rincón. Sus grandes hojas añaden un carácter dramático y sofisticado, convirtiéndola en la superestrella del mundo botánico. Si buscás hacer una declaración audaz con vegetación, ¡esta es tu mejor jugada!

Riego: Es un poco selectivo con el agua. Prefiere que la tierra esté húmeda pero no empapada. Cuando sientas que los primeros centímetros del sustrato están secos, es momento de regar.

Luz: Ama la luz brillante e indirecta. Puede soportar algo de luz directa, pero es mejor evitar el sol intenso del mediodía para prevenir que sus hojas se quemen.

Fertilización: Aliméntala con un fertilizante líquido para plantas de interior diluido cada mes durante la primavera y el verano. En otoño e invierno, puede descansar sin fertilizante.

Sustrato: Un sustrato bien aireado que drene rápidamente es el ideal. Puede ser una mezcla para plantas de interior con un toque de perlita o arena.

FaitfulTip: Esta belleza es sensible al cambio. Si decidís moverla, dale tiempo para adaptarse y evitá cambiarla de lugar frecuentemente. También, si ves que deja caer algunas hojas al adaptarse, ¡no te alarmes! Es su forma de ajustarse al nuevo entorno.

El Ficus Pandurata es más que una simple planta, es una declaración de estilo. Ponela en un lugar donde pueda brillar y ser la protagonista, y verás cómo transforma el espacio con su presencia imponente. ¡Un must para los amantes del diseño y la naturaleza!